“Humo” tal como lo entiendo yo es algo positivo para tu negocio. Pero todo a su momento…
El error que algunos cometen es que tienen humo antes de tener un buen producto cuando tiene que ser al revés. Si lo piensas igual compartes mi punto de vista.
Piensa p.ej. en Apple. ¿En qué porcentaje crees que te compras un iPhone en base de funcionalidad? Vale, estamos de acuerdo. La calidad es muy buena (o eso nos hacen pensar). Pero dudo que influya en más del 20-30% tu decisión. El resto se basa en humo.
Piénsalo otra vez. ¿Qué compras en realidad cuando te compras un iPhone? ¿La funcionalidad u otra cosa? Lo que en realidad compras y no eres del todo consciente es un estilo de vida. Le compras el “por qué” de Simon Sinek y su círculo dorado.
Y ahora dime que comprar un estilo de vida no es comprar “humo”.
Verás, lo que se puede considerar “humo” porque no es algo tangible y no tiene nada que ver con la funcionalidad o las calidades de un producto al final es algo esencial para vender.
Eso sí. Necesitas antes tener un producto en perfectas condiciones. Después ya le puedes añadir el ingrediente “mágico” del humo. Todo lo demás sería engañar a la peña. Eso tampoco es plan.
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